Quito, 1527. Amayama, única superviviente de su pueblo, es llevada al palacio de Huayana Capac, el undécimo emperador inca. Éste le revela los secretos de su reino. Al día siguiente, ella no recuerda nada. Unos años más tarde, Amayama se convierte en la confidente del nuevo emperador, Atahualpa, que debe hacer frente a una rebelión interna. Además, desembarca un pequeño grupo de conquistadores españoles, en el que encontramos a los hermanos Pinzón y a un joven noble, Gabriel, que acaba de salir de la prisión de la Inquisición.

En los primeros días de mayo de 1536 cientos de miles de indios se reúnen en las cimas de las colinas que dominan Cuzco. Forman una especie de cerco humano que rodea la ciudad: los incas están decididos a recuperar su lugar sagrado. ¿Logrará el amor de Anamaya y Gabriel superar el apocalíptico enfrentamiento?.

La supervivencia de los hijos del Sol está cada vez más amenazada. pero no son las armas de los conquistadores lo que está marcando el fin del Imperio inca, sino el oro. ¿Conseguirá Anamaya salvar su relación con Gabriel, el joven conquistador, en medio de esta profunda espiral de odio y violencia?